Invertir en una Masía con Terreno rústico: Qué Es y Cómo Aprovecharlo

La Costa Brava es un lugar excepcional, conocido por su belleza natural y sus impresionantes paisajes costeros donde podemos encontrar preciosas fincas rústicas para inversión o residencia. Si se trata de una masía, la compra se convierte en una inversión inmobiliaria única, ya que además de la belleza de su construcción, puede ir acompañada de extensiones de terreno rústico, como tierras de cultivo o bosques.

Diferencia entre masía y finca rústica

En España, la clasificación del suelo construible se divide entre suelo urbano, suelo urbanizable (aún no disponible) y suelo urbano no consolidado, que es aquel que aún no ha sido completamente desarrollado o consolidado y puede contener restricciones adicionales en cuanto a la construcción y los usos permitidos. Por otro lado, el suelo o terreno rústico es aquel destinado a explotación agrícola y, por lo tanto, no construible. Es por ello que en el argot popular una casa de pueblo se define siempre como finca rústica, aunque como vemos, no tiene por qué ser así.

• Una finca rústica, entendida como construcción de vivienda + terrenos, es una extensión de terreno con propiedad habitable ya existente, por lo general no urbanizable, y que puede tener varias catalogaciones en función del tipo de explotación agrícola.
• Por su parte, una masía es una de las construcciones de campo más características, impresionantes y de grandes dimensiones de la geografía catalana; una antigua casa de campo familiar, acompañada generalmente de extensiones de terreno rústico, como tierras de cultivo o bosques, aunque no siempre disfruta de grandes extensiones de terrenos, ya que pueden haber sido vendidos con el paso del tiempo.

Además de ello, debemos añadir que en el caso de las masías nos encontramos también que parte de ellas contiene una o varias construcciones inventariadas y protegidas como parte del patrimonio arquitectónico o arqueológico del territorio.

¿Cuáles son los Tipos de Terreno Rústico más Comunes?

Existen varios tipos de suelos rústicos: suelo rústico de protección agraria, forestal, paisajística, ambiental, cultural, de protección de cauces y riberas, de zonas de montaña y de zonas húmedas. Cada una de estas clasificaciones tiene un propósito específico y conlleva restricciones y regulaciones específicas para la construcción y actividades relacionadas, así como ayudas, si tenemos la suerte de que estén ordenadas dentro de un Plan Técnico de Gestión y Mejora Forestal (PTGMF) o de un plan simple de gestión forestal, podemos incluso obtener ayudas administrativas para su mantenimiento y rentabilización.

Encontrar una finca rústica con masía que, además, contenga una explotación agrícola o forestal y sea protegida por su valor cultural de interés nacional es, sin duda, una oportunidad única de inversion, donde encontramos los ingredientes del éxito de un próspero negocio inmobiliario.

¿Cómo se Regula la Clasificación de Suelo Rústico en Cataluña?

La clasificación de suelo rústico en Cataluña está regulada por el marco legal general español y las regulaciones urbanísticas establecidas por la Generalitat de Catalunya. El marco legal que ampara esta clasificación incluye la Ley del Suelo de Catalunya (Llei del Sòl de Catalunya) y las normativas de ordenación territorial y urbanística específicas de la Generalitat de Catalunya. Además, cada municipio puede elaborar su propio Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) o Planes de Ordenación Urbanística, que detallan las regulaciones y restricciones específicas para las propiedades dentro de su jurisdicción.

Por otra parte, y aunque menos habitual, existe la normativa de protección del territorio y del paisaje, como la Ley de Espacios de Interés Natural (LLEI 12/1985, de 13 de junio, d'espais naturals) y la Ley de Protección del Paisaje (LLEI 8/2005, de 8 de junio, de protecció, gestió i ordenació del paisatge), así como la normativa de parques naturales y espacios protegidos. En el caso de masías dentro de un área designada como parque natural o espacio protegido, estarán sujetas a regulaciones especiales de conservación y uso del suelo.

¿Puedo Construir Otra Vivienda en Mi Terreno Rústico?

Adquirir una masía para inversión suele ir de la mano de un proyecto empresarial definido. Para ello, a veces es necesario ampliar las zonas de hospedaje o vivienda. Así que es vital saber si podremos ampliar estas zonas con nuevas construcciones.

Aunque hay excepciones, el terreno clasificado como rústico es similar en cuanto a restricciones al suelo no urbanizable. Es decir, son terrenos donde no se permite construir. Además, debemos distinguir entre dos tipos de suelo rústico:

• Comunes: aquellos que, aunque no reúnan los requisitos naturales para considerarse una zona protegida, siguen siendo inadecuados para su urbanización.
• Protegidos: como su nombre indica, este tipo de suelo reúne una serie de características que requieren protección para evitar su urbanización. Por ejemplo, porque tienen valor paisajístico o natural, y su conservación, mantenimiento e incluso restauración son interesantes para todos.

Pero respondiendo a la pregunta inicial, sí, a veces es posible construir otra vivienda en terreno rústico. Y para que sea posible se deberán cumplir estas condiciones:

• La construcción deberá estar vinculada a un negocio o actividad.
• Se deberá presentar un proyecto y tramitar la solicitud de la misma manera que si fuera en un terreno urbano.
• Deberás contar con el trabajo de un ingeniero agrónomo y arquitecto.

Y por supuesto, si quieres saber si puedes ampliar la zona habitable de la finca, deberás tener en cuenta el PGOU del municipio, para lo cual deberás consultar con el ayuntamiento las opciones de construcción en tu zona, si las hubiera.

Siempre que quieras adquirir una masía en la Costa Brava, te recomendamos que consultes con tu equipo de expertos; ellos te ayudarán a solicitar los datos necesarios al consistorio pertinente para poder informarte acerca de la naturaleza, composición y usos del terreno donde se ubica tu masía.

Excepciones: ¿Cuándo SÍ puedes construir en una finca rústica?

Como decíamos, una finca rústica es una extensión de terreno no urbanizable. Pero hay casos en los que sí puede llegar a proporcionar un terreno para construcción de vivienda, regulada por las mismas normativas de edificación que el resto de viviendas.

Se trata de construir por ampliar una vivienda ya existente o bien para construir una vivienda que acompañe la explotación agrícola, ya existente también, siempre cumpliendo con las condiciones necesarias para conseguir los permisos requeridos, iniciando el proyecto constructivo del mismo modo y con los mismos profesionales que si se tratara de una vivienda en suelo urbano.

Nota importante: Esto no incluye ni mobilhomes ni bungalows, que no podrán ubicarse en suelo rústico al no ser consideradas vivienda. Este tipo de construcciones son de uso vacacional/temporal, por lo cual, si tu suelo rústico no forma parte de un camping o un alojamiento rural, no podrás contar con estas opciones. Hay que añadir además que, en el caso de poder ampliar tu masía con una construcción nueva, deberás tener en cuenta que la construcción de viviendas en suelo rústico no suele estar avalada ni por las entidades bancarias ni recibe los mismos tratamientos que un terreno urbano en cuanto a suministros (agua, luz, etc.) por parte del consistorio.

Sin embargo, no todo es malo: como decíamos, se permiten actividades de interés público en entornos rurales, así como construcciones necesarias para la explotación agropecuaria. Esto incluye la construcción de nuevas viviendas si están vinculadas a una explotación agrícola, ganadera, forestal y la mayoría de negocios relacionados con el ecoturismo lo son.

Además, no necesariamente hay que ceñirse a una sola actividad en una finca; si tus suelos rústicos cuentan con las condiciones apropiadas para realizar más de una, solo necesitarás las autorizaciones necesarias para poder llevarlas a cabo todas ellas al mismo tiempo.

Cómo Elegir la Finca Rústica Ideal: La Masía

En nuestro otro artículo, Inversiones de Lujo: Motivos para elegir una Masía en la Costa Brava te contábamos qué es una masía y cómo puede convertirse en tu inversión ideal en la Costa Brava.

Pero adquirir una masía con terreno no siempre implica que esta sea una vivienda lista para vivir. En ocasiones, la finca puede requerir una pequeña reforma, rehabilitación u otras reparaciones, especialmente si es de uso inmediato y doméstico. Además, deberá analizarse el acceso, estado de la explotación rústica y opciones de inversión, así como costes de mantenimiento. Las gestiones de selección, tramitación e información y proceso de compraventa de una propiedad inmobiliaria de estas características debe llevarse a cabo con un equipo experto de confianza, especialmente si se trata de una gestión de compra internacional o a distancia. Un servicio y consejo que sin duda encontrarás con Safire.

Aprovecha las Oportunidades en la Costa Brava

Las masías en Cataluña ofrecen una variedad de oportunidades comerciales que incluyen el turismo rural, la agricultura, la restauración y la organización de eventos. Cada actividad requiere sus trámites y permisos, pero es bien cierto que si en algo destaca la zona es en turismo, por lo cual adquirir una propiedad rural que disponga ya de licencia turística te facilitará y mucho el trabajo inicial.

Nuestras masías con terreno en la Costa Brava representan una oportunidad única de inversión. No solo podemos proporcionar información detallada sobre su estado, reformas realizadas, licencias turísticas y características del terreno, sino que también estamos comprometidos con la preservación de su valor histórico y su integración sostenible en el entorno natural de la Costa Brava. Contáctanos para descubrir cómo estas propiedades pueden convertirse en una inversión rentable y culturalmente enriquecedora.